Está científicamente probado que el estrés es un mal que está afectando actualmente a la población mundial. Lo llaman “el mal de la época”. Y, aunque no son lo mismo, también se conoce como ansiedad. Hoy hablaremos de qué es este malestar y de cómo disminuir el estrés.
El estrés cuenta con diversas técnicas para aliviarlo, de acuerdo al grado de estrés y a los síntomas que la persona sufra, las que pueden ser aprendidas en un tratamiento psicológico.
El terapeuta, en principio, ayudará al paciente a expresar las razones de su estrés, además podrá utilizar técnicas de visualización, control de la respiración, relajación, meditación y la escritura.
Si el paciente relata que sus estresores se relacionan a la presión laboral, por ejemplo, se deberá considerar si podrá delegar alguna tarea o deberá trabajar sobre la planificación realista del tiempo. Si el estrés, por otro lado, se debe a una conflictiva surgida de una relación problemática, se utilizarán técnicas cognitivo conductuales y gestálticas, además de las nombradas.
Aquí el psicólogo debe ayudar al paciente a equilibrar las áreas de su vida e incluir en su rutina diaria momentos de esparcimiento, reforzando el descanso nocturno, limitando el uso de cafeína o estímulos constantes que lo estimulen en exceso. Por ejemplo, los dispositivos electrónicos, o el mal hábito de comunicarse agresivamente en vez de escuchar y controlar sus emociones y su grado de irritabilidad y frustración.
A veces, con los primeros cambios de hábitos, el estrés disminuye. Como caminar a paso lento mientras se realiza un ejercicio de respiración, realizar actividad física, controlar la tendencia a reaccionar e integrar en nuestras vidas actividades que disfrutemos hacer, que no se relacionen con nuestras obligaciones cotidianas.
Muchas personas están estresadas debido a un sentido del deber rígido, son personalidades con las que se puede trabajar en terapia para que equilibren su actividad con períodos breves de descanso. Esto debido a que su estrés puede deberse a un exceso de autoexigencia o a realizar varias tareas a la vez, desde un sentido de perfeccionismo irrealista.
El estrés puede y debe ser tratado por un psicólogo que integre la problemática psicológica de la persona y las técnicas mencionadas para lograr un equilibrio mente-cuerpo y espíritu que mejore la salud integral.