En siglos atrás, esos que vivieron nuestros ancestros, no se podía concebir un cambio de trabajo u ocupación. Incluso las familias de inmigrantes seguían con el mismo oficio en la patria adoptiva.

Como consecuencia la forma de vida y el medio de sustento constituían marcos inalterables que posibilitaban al menos un ingreso seguro en la mayoría de los casos.

En cambio en nuestra sociedad actual lo laboral pareciese que es inestable y ya no es “un para siempre”. Situación que trae aparejada una actitud de “ir pisando huevos” cuando se tiene un empleo.

No importa los años que se tengan de antigüedad o la experiencia con la que se cuente, pocas personas pueden sentir seguridad, despreocupación y esperar su jubilación con tranquilidad sin sobresaltos. Esto ya supone un monto de stress adicional que todos debemos afrontar.

Quien está pensando en cambiar de trabajo o de frentón iniciando un proceso de búsqueda laboral presenta una serie de obstáculos que se deben sortear y que presupone no solo lidiar con factores externos, como llenar el perfil que pide la empresa o el puesto, sino de factores internos emocionales que jugarán a favor o en contra en este proceso.

Al respecto podemos plantear múltiples escenarios que generan incertidumbre, como por ejemplo si estamos aptos para el cargo, si vamos a poder adaptarnos al nuevo ambiente de trabajo, cómo serán las relaciones laborales, condiciones de flexibilidad o no, posibilidades de progreso versus estancamiento, etc. De lo que sí tenemos certeza es que la mayoría de las veces lo desconocido genera temores y ansiedades.

Aquí viene la parte en donde los psicólogos podemos hacer de apuntalamiento ante esta situación, transformando, con trabajo psicoterapéutico, lo que parecía hasta ahora un problema en una gran oportunidad.

Muchas personas creen que la consulta al psicólogo implica enfermedad mental y en realidad nuestro campo de acción es muy amplio.

Se puede perfectamente plantear un trabajo focalizado con objetivos en lo laboral o en mejorar ciertas habilidades y competencias para un mejor rendimiento. La salud mental también tiene que ver con fortalecer nuestra mente, desechando lo que no sirve o es improductivo y puliendo nuestras aptitudes.

Tips para trabajar en una consulta psicológica.

Aquí te brindo una serie de ítems que se pueden trabajar desde la consulta psicológica:

• Primero brindarte herramientas para el autoconocimiento. Una persona que se conoce sabe cuánto puede exigirse y lo que puede dar. Actitud que te dará seguridad y confianza en ti mismo.
• Aprender de modo proactivo técnicas para lidiar con el estrés y la ansiedad. Técnicas que te van a ser útiles si estás pensando en cambiar de trabajo o estas desempleado y también para la vida en general.
• Diseñar estrategias mentales para aumentar tus potencialidades y competencias.
• Atrévete a ser creativo y aprende a plantear varios escenarios con ejercicios imaginativos.
• Aprender a pensar en un futuro más optimista. Incrementará tu motivación y tus ganas de auto superarte.
• Trabajar en mejorar técnicas de comunicación para entrevistas laborales, aumento salarial, cambio de puesto, reuniones, etc. La comunicación mueve las masas y constituye una parte importante en la formula hacia el éxito.

En resumen, si quieres ponerte en forma para los desafíos laborales que se te presenten, ten presente que hay profesionales que podemos brindarte las herramientas o ayudarte a sacar a relucir las que ya posees.