Programar nuestra mente en positivo a diario
A veces nos encontramos insertos en días de mucho estrés laboral y familiar. En esos momentos tenemos una “mala predisposición”, veremos todo lo que ocurre en nuestro entorno como algo negativo, y restaremos lo positivo para destacar, o incluso justificar lo mal que lo estamos pasando, sin darnos cuenta de que estamos cayendo en un círculo vicioso de negatividad, que a su vez se desborda hacia nuestro entorno y relaciones.
Por el contrario, levantarnos cada mañana diciéndonos cosas positivas, expresando afirmaciones, reconociendo las actitudes positivas en los demás y reforzándolas, nos ayuda a fomentar las siguientes áreas:
- Crear un entorno de armonía
- Paz interior
- Alta autoestima
- Buen autoconcepto.
En este contexto, podremos comprender que, si autopedimos, de alguna forma, cosas buenas durante el día, estamos conectándonos con nosotros internamente. Esto se conoce como afirmaciones.
Con frases o palabras como: “hoy será un gran día”, “podré llevar a cabo todas mis metas” y “soy lo suficientemente capaz para enfrentar cualquier problemática”, haremos que automáticamente los pensamientos negativos vayan desapareciendo poco a poco.
Dejar de lado afirmaciones como “soy incapaz de hacerlo”, “no puedo afrontar las situaciones” o “soy una inútil”, solo dañan nuestra percepción de las capacidades que tenemos para afrontar el día a día, y nos hacen caer poco a poco en un mar de negatividad.
Afirmaciones positivas en nuestras expectativas y creencias sobre el presente y futuro
Las afirmaciones positivas que practiquemos a diario no solo nos servirán para la cotidianidad, sino que nos ayudarán a ver nuestras acciones y las de los demás con menor grado de negatividad.
Si actuamos como personas que solo se fijan en los problemas y resaltan las cualidades negativas de nosotros mismos y del entorno, en lugar de buscar soluciones que se ajusten a nuestra realidad, adoptamos automáticamente el papel de “poseedores” de un sufrimiento que nosotros mismos hemos sembrado pensando de forma negativa, volviéndonos, sin darnos cuenta, adictos a él.
Nadie desearía tener contacto con personas que actúen así, porque te hacen sentir muy mal, contagian su pesimismo, al mismo tiempo que comenzamos a hacernos cargo de las preocupaciones de los demás, somatizamos y nos estresamos. Esto promueve a que luego volvamos a nuestras casas con una mochila cargada de problemas e ir sumando a ella cada vez más cosas.
Las actitudes que tenemos formadas a través de nuestras emociones se contagian; no contagies emociones y sentimientos negativos ni dejes que te los contagien. Comienza a programar tu mente en positivo con afirmaciones positivas, que te ayudarán a ti y al resto.
El diálogo interno puede ser un gran motivador a la hora de adoptar nuevos hábitos saludables
Mejorar nuestro diálogo interior con afirmaciones positivas nos ayudará a generar nuevos hábitos saludables tales como: comenzar un nuevo deporte, unirse a un grupo de baile, mejorar nuestra forma de comer hacia una más saludable, asistir al gimnasio, o crear rutinas deportivas dentro del hogar, etc. En internet existen muchas clases para hacer en casa con elementos simples.
Para concluir, preocuparnos de nuestro autocuidado en general, va de la mano con una buena autoestima y autoconcepto, ayudándonos a ver la vida de una forma amable, llevadera y más feliz.
Si necesitas apoyo para reencontrarte con afirmaciones positivas y recordar todo lo bueno que tienes en tu vida, te invito a agendar una sesión de terapia psicológica en el horario que más te acomode.
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