Para definir la salud mental no se debe solo hablar de ausencia de enfermedades, sino del resultado de una seria de factores internos (la composición biológica, genética o fisiológica de cada individuo)
Y por supuesto, de los factores ambientales (económicos, sociales, políticos y culturales) que influyen en la estimulación de las capacidades humanas tanto individuales como sociales.
En psicología cuando se habla de salud mental la define como un “estado relativamente perdurable, en el cual, la persona se encuentra bien adaptada, siente gusto por la vida y está logrando su autorrealización.
Es un estado positivo y no la mera ausencia de trastornos mentales”. También se considera un estado normal del individuo (Davini, Gellon De Salluzi, Rossi, 1968).
De acuerdo con lo anterior, la salud mental está en la vida diaria, se relaciona en la forma como cada uno converge sus actividades en pro de ajustar sus deseos, experiencias, ideales, sentimientos y valores morales para su integración a un grupo social.
¿Cómo mejorar la salud mental?
La salud mental depende de: cómo se percibe a uno mismo, a las otras personas, y la manera de afrontar a las demandas de la vida.
La salud mental tiene como fin promover la capacidad de auto-descubrimiento; logra mantener mi auto-afirmación; mi respeto y afecto por el otro, y tener un pensamiento organizado para emitir juicios adecuados.
Lo anterior nos invita a aceptar que el hombre y la mujer se sienten plenos, cuando encuentra un objetivo a su existencia, vive su aquí y ahora y tiene conciencia del momento.
Con la práctica de afrontar el momento el individuo desarrolla la capacidad de autocomprenderse, autodeterminarse, y reconocer sus límites, es congruente, en la forma de relacionarse con el otro razonando que cada uno tiene sus experiencias, formas de percibir su realidad y adaptarse a la misma.
Por lo tanto la salud mental del hombre está en vivir el aquí y ahora, considerando cada día como un logro, donde existen momento de dolor, tristeza, incomodidad pero también instantes de felicidad.
Porque cuando somos conscientes de nuestra experiencia presente estamos descubriendo nuestras emociones con respecto así mismo al otro y al entorno que se produce.
Para concluir la Salud mental es vivir el ahora como observadores de las sensaciones y emociones dándonos la oportunidad de construir un futuro desde nuestro presente.
