Tengo baja estima, me veo menos que los demás. Me siento menos que los demás. ¿Qué puedo hacer?
Vamos a definir el autoconcepto: es cómo me veo, cómo me describo, y ese autoconcepto lo llevo a todos lados. Todos tenemos un autoconcepto y este autoconcepto genera la autoestima, que es cómo me siento con respecto a lo que pienso de mí. Lo que pienso de mí va a determinar lo que siento de mi propia persona.
¿Cómo mejoramos la baja autoestima?
La mejoramos cuando entendemos lo siguiente:
Todos los seres humanos tenemos aspectos positivos: capacidades, virtudes, áreas en las que sobresalimos. Y también tenemos debilidades, errores, vulnerabilidades. El problema está cuando yo solo veo lo que hago bien y niego mis errores y debilidades, es decir, volví un narcisista, agrando y maximizo mis capacidades y niego mis errores. Y la culpa la tienen los demás.
En el otro extremo están las personas que solo ven sus errores, entonces dicen, yo no sirvo, no valgo, no puedo.
¿Qué sería tener un buen autoconcepto?
Aceptar que todos tenemos aspectos positivos y negativos, todos tenemos fortalezas y debilidades. Cosas que hacemos bien y cosas que hacemos muy mal. Es decir, la autoestima se resuelve cuando aceptamos nuestra totalidad.
Cuando puedo identificar en qué soy débil y en qué soy fuerte, entonces tengo una buena estima. Sólo la gente segura de sí misma reconoce sus debilidades.
¿Por qué cuando reconozco mis debilidades me convierto en fuerte?
Porque puedo armar un plan para resolver esto, tal vez delegando, pidiendo ayuda. Y también me posibilita elegir cuáles de mis vulnerabilidades quiero trabajar para que terminen siendo una fortaleza y cuáles absolutamente no.
Una vez le hicieron a Einstein una pregunta de geografía y él dijo que no sabía la respuesta… “Maestro… ¿cómo, no sabe la respuesta? – No, pero conozco a alguien que si la sabe”.
Cuando reconocemos nuestras debilidades nos fortalecemos. Hay cosas que hacemos bien y cosas que hacemos mal. Las que hacemos mal es porque no le dedicamos suficiente energía. Porque le dedicamos esa energía a las cosas que hacemos bien.
Aceptar al otro con fortalezas y debilidades y vernos a nosotros mismos en totalidad hará que tengamos un buen autoconcepto. No valemos por lo que hacemos bien o mal, valemos porque somos seres humanos.
La autoestima no es fija, es algo que va variando. Vemos la realidad de acuerdo con cómo nos sentimos. Debemos darnos permiso para equivocarnos. ¡Hay vida después del error!. Tenemos que girar el radar. Una persona con baja autoestima está esperando el reconocimiento.
La autoestima se compone, de la estima global y de la estima específica; esta última tiene que ver por un lado con la valoración y la dignidad, valgo por ser quien soy. Por otro lado, también está la capacidad, por lo que puedo hacer.
- Hay gente que tiene bajo los dos brazos; es decir siente que no vale y siente que no puede.
- Hay gente que siente que vale por ser persona, pero no siente capaz.
- Hay gente que se siente capaz, pero que no vale como persona.
¿Qué pasa en nuestras mentes cuando tenemos baja autoestima?
Uno recurre a distintas actitudes para tapar la baja autoestima:
- Superioridad: yo soy mejor que todo el mundo, y hay una necesidad de mostrarse.
- Evitación: timidez, miedo de ser juzgado.
- Aislamiento.
- Pesimismo.
Los conflictos emocionales como depresión y narcisismo tienen que ver con la baja estima.
Por eso es importante cultivarnos, vernos bien y sentirnos que somos capaces.
Tips para mejorar la autoestima:
- Hacer una lista de fortalezas: Invitar a las personas que conocemos a que nos digan 3 fortalezas que ven en nosotros, y agregarlas a la propia lista.
- Saber que como los demás nos ven, es falso. Todos hablamos y decimos cosas que son subjetivas, y hay que tener cuidado con la opinión del resto.
- Empezar a validar nuestras fortalezas: hay que trabajarlas, debido a que, si tenés baja autoestima, sos experto en las debilidades.
¿Qué sucede cuando alguien señala un defecto o falta en ti? Te marca y te duele.
Pero si te dicen algo positivo, no lo crees ¿Verdad?
Eso sucede cuando se asocia la corrección al castigo, entonces la voz interna dice que lo que te dicen no es verdad sobre tus fortalezas.
Hay que transformar la voz de castigo, en la voz de la docencia y seguir adelante.
Debemos recuperar la fe, tener optimismo, es decir esperar algo bueno del futuro. Cuando subimos las expectativas, también subimos nuestra estima.